Te sorprendería la de veces que un escritor cree que, al poner el punto y final en su historia, ya ha terminado. Esto es un error. Escribir no se acaba cuando la historia termina. Ahí empieza la lectura y la reescritura.
Esto es crucial. Ni siquiera los escritores más importantes de la historia han concluido sus libros y han estado perfectos. Se debe revisar, repasar y dejar descansar lo que se ha escrito para perfeccionar nuestra obra.
¿Por qué es tan importante la reescritura?
Volver a repasar los capítulos que hemos escrito y reescribir la historia permite corregir errores y encontrar mejoras. Durante la escritura has estado dentro de la historia, pero ahora tienes que salir y empaparte de ella como si fueras el lector.
Hay que recordar que tu historia dejará de ser tuya en cuanto la muestres el mundo. En ese momento pertenecerá a los lectores, es por esto que debes reescribir para adaptar tu obra a ellos.
Trucos para mejorar lo que has escrito una vez termines
Hay dos trucos que debes emplear antes de empezar la reescritura de tu historia. Esto te hará ver con claridad qué debes cambiar, añadir o quitar a tu libro:
- Leer en voz alta: intenta leer lo que has escrito en voz alta. A veces escuchar lo que has escrito te hará ver si tiene sentido, si se lee con facilidad y si hay que añadir algún signo de puntuación para mejorar la lectura.
- Deja reposar tu escritura: guarda tu historia en un cajón. Es decir, deja que descanse y olvídate unos días. A veces es mejor no volver a tu escritura hasta dos semanas después. Así te distanciarás de la historia y cuando empieces con la reescritura tendrás otra perspectiva.
Es normal dedicarle casi tanto tiempo a reescribir como a la escritura en sí.
No te apresures ni tengas miedo a perder el tiempo. Esta técnica dará sus frutos y mejorará tu historia. Ningún escritor publicado deja su texto tal cual lo termina. Suele revisarlo junto con editores y correctores para sacar fallos y mejorar.
Sin embargo no deberías agobiarte una vez empieces a leer lo que has escrito con ideas sobre cambiar la historia de cero. Si te dan ganas de rehacer el 90% de tu historia piensa de dónde vienen esas ideas. ¿Es inseguridad? ¿Miedo a que no guste? ¿O es un pensamiento totalmente coherente porque puede mejorar la historia?
Solo si tiene sentido cambiar parte de tu historia, deberías cambiarla. De lo contrario no te agobies, solo con mejorarla un poco estará perfecta para que tus primeros lectores la valoren.
Ánimo y adelante. ¡Nos leemos!