En una novela, al contrario que en un guión o película, los diálogos no son importantes a no ser que aporten algo y sean relevantes.
Sin embargo, cuando los diálogos son cruciales en la trama, dan fluidez y riqueza a la historia. Por eso no deberían faltar.
Aunque hay momentos en los que no sabes cómo iniciar esa conversación entre personajes o se alargan y aparece un diálogo aburrido. O peor, pesado. ¿Alguna vez has leído un libro y deseas que los personajes vayan al grano? Pues a eso nos referimos. No pueden dar vueltas y vueltas, cansar al lector, a no ser que esté todo debidamente justificado.
Aquí te dejo algunas preguntas que puedes introducir en la conversación y que, a lo mejor, te ayudan a darle más vida a los diálogos.
También puedes utilizar las preguntas para hacérselas directamente a tus personajes. Habla con ellos, pídeles que te respondan para conocer nuevas inquietudes de tus personajes y entonces escribe una fantástica conversación que dará riqueza a tu historia.
Ahí van:
- ¿Te gustaría vivir para siempre?
- ¿Eres adicto/a a algo?
- ¿Cuál ha sido tu peor cita?
- ¿Sabes qué significa tu nombre?
- ¿Alguna vez has querido ayudarme en algo?
- ¿Qué me regalarías en mi cumpleaños?
- ¿Que fue lo primero que pensaste al conocerme?
- Si pudieras pedirme cualquier cosa, ¿qué sería?
- ¿Has querido contarme un secreto y no has podido?
- ¿Cuál ha sido el mejor día de tu vida?
- ¿A quién nunca le contarías tu mayor miedo?
- ¿Te irías a vivir conmigo?
- ¿Dejarías tu vida para irte lejos?
- Si te hubiera ocultado algo durante mucho tiempo por una razón importante, ¿querrías saberlo o entenderías por qué no lo he contado?
Utiliza estas preguntas para divertirte creando diálogos interesantes. Estoy segura de que será muy divertido leer tus historias después.